El marcado de trabajo cambia constantemente. Ciertamente, se adecua a las características geográficas y sociodemográficas de las regiones; pero, es inevitable que con el paso del tiempo, se vaya modificando, para bien o para mal.
Durango no es la excepción:
- En aproximadamente 15 años (2040), la población decrecerá a un ritmo de -0.2% promedio anual.
- La PEA crece a una tasa promedio anual de +0.4%, mientras que la PNEA decrece a una tasa de -0.1%.
- Lo que significa, en el mediano plazo, una mayor demanda de trabajo.
Actualmente, el mercado laboral reporta 317 mil personas, como parte de la Población Económicamente Activa (PEA) que están ocupadas; sin embargo, existen 310 mil personas disponibles para laborar, pero que son parte de la Población Económicamente No Activa o PNEA.
Por otro lado, mientras que entre 2006 y 2024 -en los últimos 18 años-, el empleo formal (0.6%) e informal (0.5%) muestran una tasa de crecimiento casi igual, la brecha que se nos presenta entre el empleo formal e informal, al año 2024 es de 474 mil trabajadores.
Esto ha generado que entre 2006, 2016, y 2024, existan cambios estructurales muy interesantes de analizar. Por ejemplo, que la brecha o déficit entre oferta y demanda de empleo haya pasado de -63 mil trabajadores en 2006, aumentara a -81 mil en 2016, y que actualmente se reporte un déficit de -43 mil trabajadores.
Un dato revelador es, que se mantengan constantes los empleos informales en una razón de 2 a 1 respecto la capacidad del mercado de absorber y crear empleos formales. En 2024, mientras los empleos formales son alrededor de 257 mil, los informales reportaron 433 mil.
